En un mundo cada vez más exigente con la forma en que se producen los bienes, en Protela sabemos que avanzar hacia una industria más limpia y consciente ya no es una opción, sino una responsabilidad. Por eso, la transformación energética se ha convertido en uno de nuestros pilares estratégicos, y el compromiso con las fuentes renovables es hoy una realidad en nuestras operaciones.
Gracias a esta apuesta decidida, logramos dejar de consumir más de 6.1 millones de kilovatios al año provenientes de la red eléctrica, una cifra que refleja el impacto positivo que puede generar una industria textil más consciente. Esta transición nos permite no solo reducir nuestra huella de carbono, sino también demostrar que la tecnología y la sostenibilidad pueden trabajar de la mano para lograr resultados tangibles.
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Pero este esfuerzo va más allá de las cifras. Se trata de una visión compartida, de un propósito claro: transformar la forma en la que se produce la moda, repensando los procesos desde su origen y apostando por una cadena de valor más eficiente, ética y sostenible. En Protela, trabajamos con energía limpia no solo en lo técnico, sino también en lo humano: con un equipo comprometido, creativo y consciente de su impacto.
Cada avance nos impulsa a seguir innovando, a repensar nuestros retos y a inspirar a otros actores de la industria a sumarse a esta ruta. Porque sabemos que cuando tejemos con propósito, la sostenibilidad se convierte en un valor que atraviesa cada fibra de nuestras telas.
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Este logro energético es solo un paso más en nuestro camino. Seguiremos apostando por soluciones responsables, por un uso más inteligente de los recursos y por prácticas que nos permitan seguir creando valor para nuestros clientes, colaboradores y el planeta.